No sé cuántos de vosotros habéis visto la película Piratas de Silicon Valley estrenada en 1999, pero si aún no la habéis visto, os recomiendo que lo hagáis. En él descubrirás una faceta completamente diferente de Steve Jobs, una faceta que pocos han presentado hasta ahora, sobre todo tras su muerte. Steve Jobs era un genio, pero sobre todo era un hombre y lamentablemente quienes lo rodeaban a veces sufrían mucho por su carácter. Steve Jobs era un perfeccionista y muchas veces humillaba a sus empleados en un intento de conseguir que fabricaran buenos productos en un corto periodo de tiempo, y esto generó una reputación de tirano dentro de la empresa Apple.
Steve Jobs no fue un padre perfecto al negarse a reconocer a su hija, en los dos primeros años después de su nacimiento, e incluso declarar ante un tribunal que era infértil. Steve Jobs cambió mucho el mundo en el que vivimos, pero también hizo mucho daño a las personas que lo rodeaban, todo con el fin de ofrecer a los consumidores los mejores productos posibles. Probablemente muchos recordarán a Steve Jobs en sus buenos momentos cuando no gritaba, maldecía ni humillaba a los empleados que no realizaban adecuadamente sus tareas laborales, pero otros lo recordarán exactamente como es, con lo bueno y lo malo.
recomiendo para leer este articulo de los de Gawker, la empresa propietaria de Gizmodo, para conocer algunas cosas de la vida de Jobs.
