Apple vs Samsung: la guerra del orgullo y una buena estrategia de promoción

  Desde hace más de un año, los procesos entre Apple si Samsung son promocionados por publicaciones de todo el mundo, y esto se debe a la popularidad de las de Apple. La compañía americana ha acusado y demostrado en repetidas ocasiones que Samsung infringe sus patentes para iDevices, siendo Steve Jobs quien inició esta guerra legal en 2010. Jobs odiaba a Android y Samsung resultó ser una filial en la guerra contra Android, socio de Apple que fabrica los "imprudencia" al copiar ciertos elementos del diseño del iPhone y de la tableta iPad cuando desarrolló sus propios terminales de la serie Galaxy. Estos dispositivos fueron prohibidos para la venta en ciertos países, en algunos la prohibición fue temporal, en otros todavía está vigente en la actualidad.

  Probablemente se pregunte por qué una empresa como Samsung, que es uno de los socios más importantes de Apple, decidió "tomar prestado" la propiedad intelectual de Apple. Bueno, todo se hizo con fines publicitarios: uno de los miembros del equipo directivo de Apple afirmó en un momento dado que los pleitos entre las dos empresas promocionaban los productos asiáticos durante un tiempo extraordinariamente largo. Los de Samsung "toman prestado" algo intencionadamente, las publicaciones señalan los deslices, Apple los demanda y les da igual si la publicidad es negativa o positiva. En el último año los de Samsung han crecido muchísimo y parte del incremento se debe a la popularidad ganada "a espaldas" de los de Apple que defendieron su propiedad intelectual.

  Por supuesto, incluso los de Apple no están exentos de culpa moral, patentan algunas tecnologías y ciertos elementos de diseño que tal vez no deberían haber sido patentados, y buena parte de las demandas se presentan sólo por orgullo. Ambas compañías tienen "arrogancias" muy grandes y las demandas son solo una representación de ellas, pero la pelea entre ellas trae enormes beneficios tanto para Apple como para Samsung. En el último año, ambas empresas registraron aumentos espectaculares en las ventas, Apple casi duplicó sus ventas en todas las áreas, Samsung registró un aumento aún mayor, y toda esta batalla resultó ser extremadamente beneficiosa.

  De momento he llegado a creer que Apple y Samsung prefieren gastar decenas de millones de dólares al año en procesos en lugar de promocionar sus productos de forma tradicional, y todo porque esta publicidad generada por los procesos sería mucho mejor.