DimInCall trae nuevas opciones para controlar la pantalla durante una llamada

  Cualquier smartphone de un fabricante inteligente cierra automáticamente la pantalla cuando tenemos una llamada encendida y acercamos el dispositivo a la oreja, pero los iPhone han tenido problemas con este sistema muchas veces. Para resolver el problema, ahora hay un ajuste llamado DimInCall, que cierra automáticamente la pantalla cuando se inicia/acepta una llamada. La pantalla se puede volver a abrir pulsando un botón Home/Bloqueo, pero si queremos podemos configurar que el cierre/apertura se haga mediante botones físicos y no de forma automática.

Compatible con iOS 5 y 6. Una gran característica de iOS es que cuando colocas el iPhone cerca de tu oreja durante una llamada, la pantalla se apaga automáticamente, en caso de que tu cara toque los botones por error. Pero lo que no lo hace perfecto es que si no sostienes el teléfono como espera el sensor de proximidad, la pantalla permanece visible, lo que facilita perder la llamada. Creo que todos ustedes han llegado a esta situación molesta. En mi humilde opinión, la pantalla debería apagarse en cuanto se conecta una llamada, en lugar de dejar que el sensor de proximidad decida. Así que aquí viene "DimInCall".

  DimInCall viene, por supuesto, con un menú de configuración donde podemos personalizar su funcionalidad, para que puedas elegir exactamente cómo quieres usarlo según tus necesidades. El ajuste está disponible al precio de 2 dólares en el repositorio BigBoss de Cydia y funciona sólo con terminales iPhone.

Básicamente, este ajuste atenúa la pantalla inmediatamente después de que se establece una conexión de llamada, y puedes iluminarla presionando el botón de inicio o de bloqueo, colgando desde el otro lado o alejándote del teléfono. También hay opciones que te permiten atenuar la intensidad con el altavoz/auriculares y vibrar mientras se conecta una llamada saliente. DimInCall te libera de preocuparte por tocar los botones por accidente y hace que las llamadas telefónicas sean tan naturales y sencillas como deberían ser.