Samsung obtuvo los contratos para la fabricación del chip A9 del iPhone 6S mediante robo intelectual

samsung tsmcSamsung y TSMC compitieron para hacerse con los contratos de Apple para fabricar el chip A9 iPhone 6S, iPhone 6S Plus o iPad Air 2, y el primero de ellos parece haber obtenido la mayor parte de la producción de los de Cupertino.

¿Cómo logró Samsung convencer a Apple para que le diera un mayor porcentaje de producción respecto a TSMC? Pues bien, los precios eran mucho más bajos que los practicados por los taiwaneses, pero para poder fabricar el futuro chip A9 mediante un proceso de fabricación FinFET de 14 nm, los de Samsung recurrieron al robo intelectual.

Específicamente, un ex gerente de TSMC robó documentos que describen el proceso de fabricación de chips dentro de TSMC y se los dio a Samsung. Ahora trabaja en una universidad patrocinada por Samsung donde los estudiantes... emplean a Samsung y ahora es el CTO de la compañía.

Si cree que este ex directivo fue castigado de forma ejemplar por las autoridades por el robo de documentos que describen una tecnología para cuyo desarrollo se invirtieron miles de millones de dólares, estaría equivocado porque sólo se le prohibió trabajar en Samsung durante 4 meses.

El tribunal superior de Taiwán falló a favor de TSMC en un caso de secreto comercial contra Liang Mong-song, ex director senior de I+D de TSMC. Liang ha sido acusado de revelar secretos comerciales y patentes de TSMC relacionados con su tecnología de proceso avanzada a Samsung Electronics. Liang jugó un papel clave al permitir que Samsung venciera a TSMC en la carrera de 14/16 nm, según un informe publicado por la revista CommonWealth de Taiwán.

El tribunal superior de Taiwán falló a favor de TSMC en su demanda contra Samsung, pero aunque la persona en cuestión es un ex alto directivo de la división de investigación y desarrollo llamado Liang Mong-song, no perderá tanto.

Gracias a la tecnología robada a TSMC, Samsung puede producir los nuevos chips A9 de Apple con un proceso de fabricación que hará casi imposible detectar el origen de estos chips, por lo que cualquiera podrá confundir un chip de TSMC con uno de Samsung y viceversa.

Para ser honesto, en toda esta historia sólo me sorprende el hecho de que la legislación taiwanesa esté tan mal pensada que genere miles de millones de dólares en pérdidas para las empresas sin que ninguna persona tenga que rendir cuentas ni ninguna empresa pague.

Todo el caso tuvo lugar en 2011 y ha sido juzgado hasta ahora, y aunque los documentos fueron robados en 2011, contenían información que presentaba los métodos de perfeccionamiento de la producción a lo largo de los años, las tecnologías utilizadas por las dos empresas evolucionaron hacia ser casi idénticas en 2015.