A pesar de que 2016 no es uno de sus mejores años, la compañía Apple se ubicó en la primera posición entre las principales marcas de las empresas más grandes del planeta, estudio realizado recientemente considerando factores como: confianza, innovación, singularidad y la precio cobrado por los productos.
En cuanto al poder de reconocimiento de marca, Apple es el líder indiscutible, el año pasado la empresa estadounidense fue superada por Google en este top, pero este año recuperó su posición, prácticamente sin hacer nada extraordinario en la línea de productos vendidos en todo el mundo.
Por supuesto, la base del estudio fue un sistema de puntuación con puntos para cada categoría analizada, y Apple ganó muchos puntos por la individualidad de la empresa, su autenticidad y el propósito establecido en la creación de productos, siendo pocos los puntos otorgados por la gestión de recursos. y el respeto que ofrece a los consumidores.
En la segunda posición de este top se encuentra la empresa Microsoft, pero la diferencia con Apple es mínima, considerando los participantes de este estudio que Microsoft lanza productos mucho más innovadores que los de la empresa Apple, y si miramos los últimos años , esto es lo más cierto posible.
Las empresas de tecnología ocupan los dos primeros lugares en la clasificación de este año y disfrutan de fuertes percepciones en todas nuestras mediciones. Seis de las veinticuatro “marcas del futuro” están en el sector tecnológico, una menos que en 2015. Una “marca del futuro” es una marca que tiene más probabilidades de tener éxito en el futuro, no solo una que es fuerte ahora. Esto se debe a que equilibra perfectamente las fuertes percepciones de su propósito en el mundo con la experiencia que ofrece.
Apple todavía ocupa una buena posición en este tipo de listas gracias al estatus que se ganó con el lanzamiento del iPhone o iPad, pero sin productos innovadores en un futuro próximo, los de Cupertino tendrán grandes problemas para mantenerse como favoritos en la mente de los consumidores del todo el mundo.
