Japón quiere demandar a Apple por los contratos que la compañía estadounidense impone a los operadores de telefonía móvil, obligándolos a vender el iPhone sólo bajo las condiciones impuestas por ella. Las autoridades japonesas habrían descubierto que los acuerdos entre Apple y los operadores de telefonía móvil le habrían permitido dominar las ventas en Japón, en detrimento de sus competidores.
Más precisamente, los de Apple prohibirían a los operadores de telefonía móvil vender existencias de terminales iPhone antiguos en el país, debiendo venderlos en otras zonas, siendo Hong Kong una de ellas. Además, Apple pidió a los operadores que dieran un trato preferencial a sus terminales, promocionándolos en detrimento de los de Samsung, por ejemplo.
Las autoridades observaron que aunque el iPhone 7 y el Samsung Galaxy S7 tienen el mismo precio de venta estándar, el iPhone 7 tiene un precio de suscripción más bajo que el terminal de Samsung. Lo mismo ocurre con otros terminales de la competencia de Apple, y la situación se remonta a varios años atrás, de ahí la explicación de las altas ventas en Japón.
La diferencia entre los precios de los terminales de suscripción de Apple y los de Samsung es aproximadamente del 50% en el caso del iPhone 7 y Samsung Galaxy S7, por lo que los coreanos debieron denunciar el problema a las autoridades. Ahora las autoridades japonesas están tratando de descubrir qué tipo de acuerdos hizo Apple y cómo pueden demandarla por violar las leyes antimonopolio.
"La Comisión de Comercio Justo de Japón (FTC) dijo que NTT Docomo, KDDI Corp y Softbank Group se negaban a vender modelos excedentes de iPhone más antiguos a minoristas externos, obstaculizando así a los competidores más pequeños. Apple no fue nombrada en ese informe, pero dos fuentes gubernamentales de alto nivel dijeron a Reuters que los reguladores también se estaban centrando en los acuerdos de suministro de Apple con los tres operadores".
La situación en Japón es idéntica a la de Europa, por ejemplo: Apple obliga a sus socios europeos a actuar de manera similar para favorecer al iPhone. Por supuesto, no todo el mundo respeta estas indicaciones de la compañía Apple, principalmente porque las cláusulas abusivas de los contratos no pueden ser sustentadas en los tribunales, pero pocos se desvían de las normas por miedo a no recibir pequeñas existencias de terminales iPhone cuando se lanza un nuevo modelo.
