iPhone X: medida de última hora para aumentar la producción

El iPhone X obligó a Apple a tomar una medida de última hora que tiene como efecto aumentar la producción de un componente que planteaba grandes problemas de montaje.

iPhone X obligó a la empresa Apple tomar una medida de última hora para poder aumentar la producción de su teléfono y cubrir la demanda actual del mercado. Todos sabemos cuántos problemas tuvo la compañía Apple con la producción del iPhone X hasta ahora y cuánto le costó solucionarlos, pero ahora tuvo que tomar una medida desesperada para poder sacar más unidades disponibles al mercado.

Problemas del iPhone X estaban estrechamente vinculados a la cámara TrueDepth que cuenta con sensores láser e infrarrojos para crear un mapa 3D de nuestro rostro. Los componentes de esta cámara del iPhone X eran tan difíciles de producir que la producción del teléfono se detuvo, y Apple logró permitir a sus socios aumentar su producción reduciendo las especificaciones de estos componentes.

Para iPhone X de Apple impuesto controles muy estrictos para los componentes de la cámara 3D, con un pequeño margen de tolerancia, lo que dificultó probar los componentes y producir módulos casi perfectos. Cambiar las especificaciones de estos componentes permite a los socios de Apple probar los componentes más rápido y producirlos con más imperfecciones.

iPhone X: medida desesperada de último momento para aumentar la producción

iPhone X Medida Última Hora 1

Parece que el sensor que proyecta 30.000 puntos láser en nuestra cara es muy difícil de producir y muy frágil, siendo extremadamente difícil su prueba. Estamos hablando de un láser microscópico y lentes de vidrio, las muy estrictas especificaciones de producción impuestas por Apple obligaron a uno de los 3 socios de producción a renunciar al contrato, quedando Apple con solo uno para suministrar los componentes.

"A Apple se le ocurrió una solución: les dijo discretamente a los proveedores que podían reducir la precisión de la tecnología de reconocimiento facial para facilitar su fabricación. La precisión es clave. Si los componentes microscópicos están desviados aunque sea por varias micras, una fracción del ancho de un cabello, la tecnología podría no funcionar correctamente, según personas con conocimiento de la situación".

La fragilidad de este sensor láser utilizado en la cámara frontal 3D del iPhone X generó problemas no solo en la producción, sino también para quienes integraron el componente en el módulo completo de la cámara. Los muy estrictos requisitos de Apple para la producción de este láser casi paralizaron la producción por completo, por lo que los americanos tuvieron que renunciar a algunos requisitos para poder tener algunas unidades de iPhone X a la venta.

El cambio realizado por Apple en los componentes de la cámara del iPhone X supondrá un aumento de la producción, pero nadie sabe de qué manera se verá afectada la calidad de la cámara. Es posible que Face ID ya no realice el reconocimiento facial con tanta precisión o rapidez en el nuevo teléfono, por lo que será interesante ver cómo se verá afectada la funcionalidad; el cambio seguramente tendrá otros efectos.