Donald Trump fue blanco de un ataque de espionaje planeado por los chinos, que enviaron a una mujer al complejo Mar-a-Lago, propiedad del presidente estadounidense, mientras éste se encontraba de visita allí. La mujer fue arrestada cuando intentaba ingresar a varias áreas de los edificios del resort, y esto después de que se le permitió ingresar allí por error, debido a una confusión.
El equipo de seguridad de Mar-a-Lago dejó entrar a la mujer porque su apellido era similar al de alguien que ya estaba registrado y tenía acceso allí. A la mujer se le encontraron cuatro teléfonos móviles, un disco duro externo, un ordenador portátil, dos pasaportes chinos y una memoria USB que contenía archivos maliciosos destinados a infectar los dispositivos electrónicos de Donald Trump.
Agentes del Servicio Secreto arrestaron a la mujer, pero el incidente de seguridad puede ocurrir en cualquier momento, lo que demuestra que las medidas de seguridad impuestas son ineficaces. No se sabe exactamente cómo la mujer habría querido comprometer los dispositivos electrónicos del presidente estadounidense con el malware que tenía en la memoria USB, pero probablemente las autoridades estadounidenses lo descubrirán.
Una mujer china de 32 años que llevaba cuatro teléfonos móviles y una memoria USB infectados con malware obtuvo acceso a Mar-a-Lago durante la visita del presidente Trump al centro turístico de Florida durante el fin de semana, según muestran registros de la corte federal.
Es posible que la mujer quisiera infectar la red de Internet del resort propiedad de Donald Trump, y así obtener información secreta ya sea de los agentes del Servicio Secreto o de Donald Trump. Este es el incidente de seguridad más grave que involucra al presidente estadounidense en 2019 y puede que no sea el último.
