El Gobierno de Rumanía ha tomado la decisión, junto con el presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, de realizar una serie de flexibilizaciones antes del 1 de junio, renunciando a la mascarilla al aire libre, y a las restricciones de circulación, que se aplicarán a partir del 15 de mayo.
El gobierno rumano afirma que la disminución mucho más rápida del número de nuevos casos de infección motivó esta decisión y ya desde hace unos días tenemos muy por debajo de los 1000 nuevos casos, a pesar de que hace dos semanas fue Semana Santa, la evolución de la pandemia en Rumania siendo uno muy positivo.