Huawei: medida de GRAN impacto que sorprendió al mundo entero

 

Huawei sigue siendo uno de los fabricantes más importantes de teléfonos, equipos informáticos, software y más, y recientemente tomó la decisión de implementar una medida con un impacto muy grave.

Huawei decidió en 2019 crear un fondo de inversión llamado Habo, cuyo objetivo era invertir en varias empresas, de China y más allá, y a principios de este año comenzó a ser extremadamente activo en la inversión en cierto tipo de empresas.

Huawei necesita desesperadamente chips con procesadores para sus teléfonos y tabletas, viéndose ahora obligada a utilizar únicamente los de Qualcomm que no le permiten ofrecer conectividad 5G a sus clientes. Como esta situación no es muy buena para Huawei, la empresa obtuvo para Habo el permiso de las autoridades chinas para aceptar inversiones extranjeras, pero al mismo tiempo invirtió en varias empresas chinas que fabrican chips para varios dispositivos interconectados.

Huawei está intentando fabricar localmente procesadores para teléfonos, tabletas o incluso equipos 5G, para rivalizar con los de los taiwaneses o los estadounidenses, aunque hasta ahora no lo ha logrado. Habo es la clave de este proceso, el fondo de inversión ya está realizando una serie de inversiones en empresas que producen este tipo de componentes, teniendo inicialmente casi 500 millones de dólares disponibles, y una parte ya se ha gastado en todo este proceso.

"El gigante chino de equipos de telecomunicaciones Huawei ha obtenido una licencia en China que le permite buscar capital extranjero. Habo Investments, establecida por Huawei en abril de 2019, se registró en la Asociación de Gestión de Activos de China como administrador de fondos privados el 14 de enero, lo que le permitió buscar inversores externos. La mayoría de los acuerdos de Habo Investment se han realizado en empresas chinas relacionadas con chips, varias de las cuales se han convertido en parte de la cadena de suministro de Huawei”.

Huawei espera que sus inversiones le permitan en los próximos años obtener todos los procesadores que necesita para sus terminales móviles, pero también varios otros tipos de componentes importantes para estos dispositivos.

Por supuesto, hará falta mucho tiempo para que las tecnologías estén suficientemente preparadas para ofrecer exactamente lo que la empresa china necesita, pero no tiene por qué no intentar realizar importantes inversiones de este tipo.

Huawei todavía no renuncia a la producción de teléfonos y tabletas y, a falta de un posible levantamiento de las sanciones estadounidenses contra ella, soluciones de este tipo siguen siendo las únicas a las que puede recurrir.