Los teléfonos inteligentes provocan síntomas de TDAH

 Menos de una década después de la aparición del primer iPhone, lo primero que muchos usuarios se ponen por la mañana es su smartphone, más rápido, con más frecuencia y más que su taza de café, su cepillo de dientes o incluso su pareja en la cama.

A lo largo del día, nuestro teléfono inteligente está en nuestro bolsillo o bolso, podemos revisar nuestro correo electrónico durante el día y, sin importar lo que hagamos, muchos de nosotros somos bombardeados con notificaciones de nuevos mensajes, publicaciones en redes sociales, noticias de última hora, actualizaciones de aplicaciones y mucho más. más.

Algunos estudios recientes sugieren que esta ubicuidad de los teléfonos inteligentes nos hace cada vez más distraídos e hiperactivos. Estos síntomas suelen aparecer en casos de trastorno del neurodesarrollo, es decir, TDAH. Quienes realizaron el estudio pidieron a 221 estudiantes Millennial de la Universidad de Columbia Británica que participaran en un estudio de dos semanas.

Durante la primera semana, pidieron a la mitad de los participantes que "minimizaran" las interrupciones provocadas por el teléfono activando la configuración "no molestar" y manteniendo sus teléfonos a la vista. Entrenaron a la otra mitad y les pidieron que dejaran encendidas sus alertas habituales y mantuvieran el teléfono lo más cerca posible de ellos.

En la segunda semana, invirtieron las instrucciones. El orden en el que daban instrucciones a cada participante se determinó aleatoriamente. Se confirmó que las personas se sentían más distraídas con sus teléfonos cuando tenían las alertas activadas que cuando no las tenían..

Los especialistas midieron la hiperactividad pidiendo a los participantes que identificaran con qué frecuencia sentían los 18 síntomas del TDAH en cada una de las dos semanas. Estos ítems se basaron en los criterios para el diagnóstico de TDAH en adultos especificados por la Asociación Estadounidense de Psiquiatría y el Manual Estadístico (DSM-V).

Después de las preguntas, cubrieron una amplia gama de problemas potenciales, como cometer errores por descuido, dificultades para mantener la atención o escuchar a las personas que lo rodean. Las preguntas sobre hiperactividad fueron similares, evaluar cosas como la sensación de inquietud, hablar excesivamente e interrumpir a las personas que lo rodean.

Los resultados fueron claros: las interrupciones del teléfono hicieron que las personas estuvieran mucho menos atentas y más hiperactivas, pero no demostró claramente que estos hallazgos sugirieran claramente que los teléfonos inteligentes puedan causar TDAH.