Hace unas semanas os presenté una memoria USB comúnmente conocida como Killer USB porque es capaz de destruir casi cualquier dispositivo electrónico. Cualquiera que inserte esta memoria USB en una computadora quemará los componentes internos e impedirá el uso de esa computadora para cualquier tipo de tarea ordinaria.
Si la última vez no se pudo destruir un iPhone 7 con esta memoria USB, bueno, otros modelos de iPhone más antiguos tampoco son vulnerables, pero las tabletas iPad sí lo son. El mayor problema, sin embargo, reside en el hecho de que el nuevo MacBook Pro se puede destruir muy fácilmente con esta memoria USB, introduciéndola en el puerto "matando" el portátil en el acto.
Las memorias USB de este tipo se pueden comprar con bastante facilidad en Internet en los EE. UU., por lo que cualquiera puede utilizarlas para dañar a otras personas. Teniendo en cuenta que la simple inserción de esta memoria USB en un puerto destruye cualquier ordenador o portátil, no se descarta que en el futuro veamos personas que se quejen de ordenadores destruidos sin saberlo.
