Hace un tiempo, la Casa Blanca prohibió el uso de teléfonos inteligentes en determinadas zonas de su interior, principalmente en el ala oeste, donde tiene su despacho el presidente estadounidense. La decisión de prohibir los teléfonos inteligentes se extiende ahora a otro tipo de dispositivos que tengan Wi-Fi, Bluetooth, chip de radio FM o cualquier otra función para la transmisión de datos GSM.
El jefe de gabinete del presidente estadounidense, Donald Trump, impuso esta nueva norma, por lo que todos aquellos que trabajen, al menos en el ala oeste de la Casa Blanca, no podrán utilizar sus gadgets en el trabajo. Aquí también incluimos el Apple Watch, o cualquier otro reloj inteligente, y esto se debe a que los estadounidenses tienen miedo de "filtrar" información comprometedora a la prensa.
Aparte de los teléfonos inteligentes, tabletas y relojes inteligentes, parece que en algunas zonas de la Casa Blanca ni siquiera se pueden utilizar pulseras de fitness, ya que allí la paranoia es muy alta. Oficialmente, los motivos para la implementación de esta política son detener las "fugas" de información a la prensa y aumentar la productividad del personal, pero cada uno cree lo que quiere.
"La política va más allá de lo esperado inicialmente y no se limita sólo a los teléfonos móviles personales. También incluye computadoras portátiles, relojes inteligentes y "dispositivos con capacidad WiFi, Bluetooth, radio o celular" y "cualquier dispositivo portátil que emita una señal eléctrica y no haya sido emitido por la Agencia de Comunicaciones de la Casa Blanca", según el memorando.
La realidad es que hace unos meses el iPhone del exjefe de gabinete del presidente estadounidense quedó comprometido y se accedió a información confidencial de la administración. Desde entonces comenzaron las discusiones sobre la prohibición de los smartphones en el local, algo que sucedió, y ahora también están prohibidos otro tipo de gadgets.
